¿Sabes quién hay detrás de los orígenes de la industria de la cosmética? Desde la creación y comercialización del perfume más famoso del mundo hasta los primeros productos de belleza para pieles negras, fueron muchas las mujeres que dieron el impulso definitivo a un sector que prometía ser muy relevante.
Ponemos nombre a las mujeres que, con su trabajo y visión de negocio, fundaron un negocio a principios del siglo XX que hoy en día genera millones de beneficios en todo el mundo. Unas mujeres que cambiaron la industria de la belleza y cuyos nombres merecen ocupar un lugar relevante en nuestra memoria.
Helena Rubinstein: artífice del cuidado de la piel
De origen polaco, Chaja Rubinstein -después conocida como Helena- comenzó su andadura en la cosmética de una forma algo casual. De muy joven en 1902 fue enviada a Australia con unos familiares y en la maleta su madre le envió unos cuantos botes de crema facial elaborados con una receta casera a base de lanolina (una cera natural extraída de las ovejas). Su rostro níveo y sin imperfecciones llamaba la atención y, gracias a esa carta de presentación, vio enseguida que sus cremas podían tener un nicho de mercado interesante.
Fábrica de Helena Rubinstein en 1964 y la creadora aplicando sus productos a una clienta.
A partir de ahí mejoró su composición y comercializó sus propias cremas bajo el nombre de Valaze. En poco tiempo trabajó con dermatólogos, se especializó y se convirtió en un referente en el cuidado de la piel abriendo diversos salones de belleza en Melbourne, en Sídney, Londres y París, creando una de las primeras compañías cosméticas del mundo. Su salto a EEUU con motivo de la I Guerra Mundial supuso el lanzamiento definitivo a su marca convirtiéndose en los años 50 en todo un imperio con 14 fábricas de cosméticos de todo tipo.
Madam C.J. Walker: primeros cosméticos para mujeres negras
En un momento en el que las mujeres negras tenían muy poco qué decir, Madam C.J. Walker fue (y es) toda una inspiración que rompió barreras. Madam C. J. Walker se convirtió en la primera mujer afroamericana millonaria en Estados Unidos gracias a su aplaudida línea de productos cosméticos y para el cabello para mujeres negras. Un carácter visionario y ambicioso que se despertó tras padecer alopecia y lograr mejorar los productos que le recomendaban en su propia cocina con ingredientes naturales.
Madam C.J. Walker conduciendo un vehículo junto a otras compañeras.
Así nació el primer producto de belleza específico para cabellos de personas negras, el Wonderful Hair Gromer. En 1904 comenzó a vender sus productos, a publicitarse y a “entrenar” a otras mujeres para que se convirtieran en sus delegadas, motivándoles para que fueran independientes económicamente. Sobre 1910 su empresa ya alcanzaba a mercados fuera de los Estados Unidos, facturando millones de dólares y creciendo con gran rapidez.
Anuncio con la gran expansión de los productos de Madam C.J. Walker.
Si quieres saber más sobre la historia de Madam C.J. Walker, una de las mujeres que cambiaron la industria de la belleza, no te pierdas la serie Madam C. J. Walker: Una mujer hecha a sí misma de Netflix protagonizada por Olivia Spencer.
Coco Chanel: un perfume con nombre propio
Coco Chanel es la más conocida de la lista de estas grandes emprendedoras y, aunque quizás no necesite más homenajes, es justo reconocerle su influencia en el sector de la perfumería. A ella le debemos grandes avances en la moda como la racionalización de la figura femenina o la utilización de cortes y tejidos unisex pero también uno de los perfumes más icónicos de la historia: el Chanel nº5.
Coco Chanel, una de las mujeres que revolucionaron la industria cosmética.
Esta fragancia fue la primera en llevar directamente el nombre de una diseñadora y marcó el inicio de una potente industria con la creación de la entidad Parfums Chanel en 1924. Aunque en un principio la financiación venía de grandes empresarios, la modista luchó durante veinte años para hacerse con el control total de la compañía.
Joan Bove: revolución en el tinte de cabello
Con un espíritu altamente emprendedor y gran conocedora de las necesidades estilísticas de las norteamericanas, Joan Clair (pseudónimo que adoptó posteriormente) y su marido Lawrence M. Gelb, un fabricante de productos químicos, viajaron a Francia en 1931 para buscar oportunidades comerciales. Allí descubrieron un tipo de preparación innovadora que servía para teñir el cabello y que se diferenciaba de las coloraciones artificiales que hasta entonces conocían. El producto, llamado Clairol, penetraba en el cabello, daba un aspecto natural y tenía una formulación que facilitaba su uso tanto en salones de peluquería como en casa. Joan Bove lo vio claro en el momento y allí nació una empresa que revolucionó la belleza de las mujeres de mediana edad, hasta entonces olvidadas.
Campaña de tintes de pelo Miss Clariol.
Elizabeth Arden: empoderamiento femenino
Tras el nombre de Florence Nightingale Graham se esconde una de las marcas más reconocidas de la industria de la belleza: Elizabeth Arden. A ella se le debe el maquillaje como arma de empoderamiento ya que desde el principio lo concibió como una herramienta para “verse guapa” y no para agradar a su marido. Elevó el carmín rojo a tendencia y lo enmarcó en la lucha social. De hecho, como dato curioso, en 1912 Elizabeth Arden repartió pintalabios rojos a las sufragistas que marchaban por las calles de Nueva York para exigir el voto femenino.
Elizabeth Arden y una publicidad de una campaña de pintalabios en 1955. Vía Alamy Stock Photo.
La empresaria comenzó trabajando a principios de siglo en un laboratorio farmacéutico donde aprendió los componentes químicos más beneficiosos en el cuidado de la piel. A partir de ahí se decidió por crear su empresa y en 1910 abrió su primer salón Red Door en la Quinta Avenida de Nueva York. En constante competencia con Helena Rubinstein, Arden buscó en Europa nuevos productos con los que conquistar al público y así introdujo en EEUU el maquillaje para ojos y los polvos bronceadores. Muchos fueron sus hitos como su crema Eight Hour Cream (1930) o su spa, el Maine Chance Spa, un templo en el que relajarse.
Cinco nombres de mujeres que cambiaron la industria de la belleza y que hoy en día seguimos recordando. ¿Conocías todas estas historias?
*Imagen de portada: Coco Chanel en 1931
