Aunque hay que cuidarlo todo el año, en el verano es cuando el cabello sufre más. Los rayos solares que inciden con fuerza, el calor y el sudor, la sal del mar, el cloro de la piscina, el viento y los moños y coletas con el pelo mojado hacen que este se vea afectado y que haya que tomar medidas cuando llega el otoño. Por eso, por mucho cuidado que tengamos seguramente tendremos que aprender cómo reparar el pelo dañado tras el verano.
Como expertxs en peluquería con nuestro Curso de Peluquería de plató, te ayudamos a identificar los signos que indican que el pelo necesitan un tratamiento especial y cómo llevarlo a cabo. No te los pierdas y consigue un cabello sano y radiante lo antes posible.
¿Cuáles son las causas del pelo dañado?
Las causas del pelo dañado, como hemos dicho, son muchas pero en verano generalmente se deben a factores externos como el agua del mar y piscinas y el sol. Las rutinas que utilices el resto del año también pueden empeorar la salud del cabello y los principales motivos son el uso excesivo de herramientas de calor como secadores, planchas, rizadores, etc. sin aplicar productos protectores o las coloraciones, tintes o tratamientos con componentes químicos muy agresivos.
Cómo prevenir el daño en el pelo
Para evitar el cabello dañado es importante llevar a cabo un mantenimiento continuo, con cortes de pelo y saneamientos periódicos, mascarillas hidratantes y productos como champús, suavizantes o sérums de calidad. Además, es bueno apostar por coloraciones con los menos químicos posibles y minimizar el uso de planchas y secadores a muy alta temperatura. Por otro lado, cepillar suavemente y tener cuidado al quitar el exceso de agua con la toalla son otros de los hábitos saludables para nuestra melena.
Durante el verano, hay que cuidar más el pelo y tomar algunas medidas extra como aplicar productos específicos fotoprotectores para el cabello o utilizar sombreros para que el sol no le afecte durante demasiadas horas.
Identificando los signos del pelo dañado
¿Cómo identifico los signos del pelo dañado? ¿En qué se nota que requiere de tratamiento urgente? Desde la deshidratación a la caída, son muchas las señales en las que te puedes fijar para decidir una medida u otra. Está claro que si tu pelo está en mal estado te darás cuenta enseguida.
Sequedad y frizz
El primer síntoma es la deshidratación y sequedad y lo podrás notar en que cabello está más áspero al tacto y rugoso, ha perdido su suavidad y por tanto también es menos elástico. Otro efecto es que se enreda con más facilidad y puede ser incluso complicado peinarlo y que quede bien. Además, el cabello seco pierde el brillo y tiende a encresparse con facilidad, especialmente en climas húmedos.
La sequedad en el cabello se produce porque, debido a la acción de productos y agentes externos, ha perdido la grasa que lo cubre y la cutícula pasa de ser lisa y uniforme a abrirse y dejar escapar el agua de las fibras provocando su deshidratación.
Puntas abiertas
Otro de los signos obvios que empujan a reparar el pelo dañado son las llamadas puntas abiertas. Esto se debe al debilitamiento de la estructura del cabello por la falta de humedad interna o por el desgaste de las hebras. Resulta muy fácil identificar este problema ya que observaremos cómo las puntas (y a veces los medios) del pelo son finas y se abren en dos o más partes. Cortar la parte afectada es la solución más recurrente pero no la única ya que con tratamientos intensivos se puede mejorar mucho.
Caída excesiva de pelo y rotura
La caída del pelo en otoño es relativamente normal pero si notamos una caída excesiva tenemos que buscar soluciones inmediatas. El cabello dañado es más propenso a caerse ya que el cuero cabelludo no está sano y se debilita el anclaje del pelo. Además, cuando hay algún problema de este tipo es más fácil que se caiga o se rompa al cepillarlo o al más mínimo tirón al realizar una coleta o recogido.
Cómo reparar el pelo dañado paso a paso
Ahora que ya sabes qué le pasa a tu melena después del verano, te damos algunas claves sobre cómo reparar el pelo dañado paso a paso. Aunque existen muchos tratamientos disponibles para hacer en casa, si los efectos son importantes, te recomendamos acudir a un salón profiesional.
Detox capilar
Uno de los tratamientos que están más en auge para reparar el pelo en momentos puntuales es el detox capilar. Este consiste en limpiar en profundidad el cuero cabelludo para eliminar los restos de productos, polución, suciedad, células muertas y coloración que hayan podido quedar y comenzar a tratarlo de cero. Para un buen resultado conviene realizarlo a manos de profesionales que procederán a la exfoliación con un suave masaje y a la limpieza y la humectación para que recobre su grasa natural y trabaje a pleno rendimiento.
Con el detox capilar se consigue oxigenar el cuero cabelludo para que el cabello recobre su brillo natural. Asimismo, tras este tratamiento nos aseguramos de que los productos que aplicamos después se absorban mucho mejor.
Tratamientos de hidratación profunda
Para reparar el pelo dañado tras el verano nada mejor que un tratamiento de hidratación profunda en un salón profesional, que utilizan los mejores productos adaptados a las características de cada cabello. Destacamos algunos de ellos:
– Bótox capilar: Se trata de una opción para regenerar y nutrir el cabello de forma intensiva y ofrece una una combinación de productos y técnicas que incluyen una mascarilla con vitaminas, aminoácidos, proteínas, ácido hialurónico y colágeno.
– Keratina: Esta es útil para combatir el encrespamiento y es aconsejable para el pelo seco y dañado. Los tratamientos de keratina para el pelo están formados de proteínas hidrolizadas que se fijan al pelo usando calor.
– Mascarillas: Las hay con múltiples formulaciones, propiedades, duración y forma de aplicación. Elegir la más adecuada para el problema y el tipo de cabello es la clave para que el resultado se vea a los pocos minutos.
Productos de calidad
Una vez hidratado, llega el momento de mantener el pelo en buena forma y para ello hay que elegir productos de máxima calidad libres de químicos agresivos o que sean naturales y que respeten la estructura del cabello. En esto se incluyen tanto los tintes como la forma de aplicarlos así como las técnicas de peinado, que deben ser lo más respetuosas posible con el pelo.
Remedios caseros efectivos para reparar el pelo
Si prefieres apostar por remedios caseros para reparar el pelo, puedes realizar exfoliaciones del cuero cabelludo y aplicar mascarillas con productos naturales muy efectos. Las opciones son muchísimas pero entre los ingredientes que mejores resultados dan encontramos los aceites naturales como el de coco, el de almendras y, sobre todo, el aceite de argán. Este último tiene múltiples propiedades nutritivas que notarás enseguida en tu melena. El aguacate, la avena, la miel y el huevo también son grandes aliados para reparar el pelo dañado.
Ahora ya sabes qué hacer si notas que tu pelo en estas fechas está más áspero y debilitado. Reparar el pelo dañado es fácil poniéndose en manos de profesionales.