¡Estrenamos sección! En “Hoy hablamos con…” desvelaremos los entresijos de la escuela charlando con miembrxs del equipo, profesorxs, colaboradores de marcas o ex-alumnxs para que conozcas en primera persona cómo es Køhl School por dentro. Y, como no podía ser de otra forma, empezamos entrevistando a una de las personas más especiales del equipo: Rosa Montes, la encargada de la limpieza en la escuela.
Con un trabajo duro -y a veces invisible-, Rosa no solo es fundamental para el desarrollo de las clases de maquillaje sino que además es muy querida por todxs nuestrxs alumnxs y equipo docente. Lleva con nosotrxs mucho tiempo y, como curiosidad, siempre está dispuesta a ayudarnos dejándose maquillar y posando como modelo cuando nos hace falta.
¿Cómo recuerdas tu primer día en Køhl School? ¿Qué sentiste al empezar?
Para mí fue una experiencia totalmente nueva. Era un mundo que siempre me ha gustado pero al principio me sentía un poco sorprendida y retraída. Empecé en 2014 en las otras sedes que teníamos antes de llegar a esta y todo era muy diferente a lo que conocía. Poco a poco fui tomando conciencia de dónde estaba y aprendiendo a adaptarme. Con el tiempo han pasado alumnxs de todas las edades y recuerdo también que desde el principio fue muy divertido: me hacía sentir joven y con mucha energía, como una persona de 20 años nuevamente.
Porque… ¿cuántos años tenías cuando empezaste?
Hace casi 12 años así que tenía unos 53 años.
Cuéntanos cómo llegaste a Køhl School.
Llegué a la escuela de maquillaje Køhl School gracias a mi hija que empezó siendo alumna. Ahí conocí este lugar y aproveché la oportunidad de trabajo que surgió. Desde ese primer momento me sentí parte de la escuela y la verdad es que he disfrutado cada día que he pasado aquí.

¿Cómo describirías el ambiente de trabajo en la escuela en estos años?
Para mí, Køhl School siempre ha sido como una segunda casa. Hay momentos de conflicto, como en cualquier familia, y eso nos afecta a todxs, pero aquí siempre ha habido un ambiente de apoyo y cercanía. Me importa mucho el bienestar de cada persona y trato de ayudar siempre que puedo. He tenido muy buenas relaciones con compañeros actuales y antiguos, y aunque hemos pasado días difíciles, no me arrepiento de nada. Estoy muy contenta de haber formado parte de este equipo.
“No veo solo una escuela de maquillaje, veo una familia”
¿Qué es lo que más te emociona o te hace sentir parte del equipo?
Lo que más me emociona son los momentos compartidos con los compañerxs, como las celebraciones de Navidad o cumpleaños. En esos momentos, no veo solo una escuela, veo una familia y disfruto estar con ellos. Además, siempre hablo con orgullo de la escuela con mis hijas, hermanos y familia; siento que forman parte de mi vida y eso me llena de alegría.
¿Hay algún compañerx con quien hayas tenido una conexión especial?
La verdad es que todxs lxs compañerxs son especiales pero sí hay algunas personas con las que he sentido una conexión más cercana. Por ejemplo, Cristina siempre ha sido muy especial para mí y también Mónica, que es la más reciente en el equipo. Además, hubo alguien con quien me llevé de maravilla, con Pilar, a quien sigo teniendo en mi corazón aunque ya no la vea todos los días. Son relaciones que siempre guardaré con mucho cariño.
Cuéntanos un poco cómo es un día perfecto para ti dentro de Køhl School. ¿Qué haces desde que llegas? ¿Qué es lo que más te gusta o relaja?
Cuando llego, lo primero que hago es cambiarme de ropa y dar un repaso general a las aulas. Me gusta que todo esté limpio y ordenado, sobre todo porque algunas clases de maquillaje empiezan a diferentes horas y quiero que todo esté preparado para lxs alumnxs. Uno de los momentos que más disfruto es cuando nos sentamos a comer juntos, nos reímos, charlamos y compartimos cosas del día a día. Para mí, esos momentos son como estar con mi familia. Además, me gusta cuidar cada detalle, recogiendo y dejando la escuela en perfectas condiciones para que refleje una buena imagen.

¿Tienes algún pequeño ritual o algo que hagas de manera especial en la escuela que la gente no conoce?
Sí, tengo un pequeño detalle que me gusta cuidar mucho: coloco las sillas de manera perfectamente alineada y equilibrada en cada aula. Si algo no está bien colocado, vuelvo a ajustarlas. Para mí es un gesto sencillo pero me da satisfacción ver que todo está ordenado y armonioso.
Con tanto maquillaje, productos de caracterización, moldes, herramientas y accesorios… ¿cómo quedan las aulas después de un día intenso? ¿Cuál ha sido el mayor “desastre” que has tenido que solucionar?
El mayor desastre fue una vez que en clase de caracterización utilizaron sangre artificial y, en vez de limpiarla, le echaron más agua. Parecía “la matanza de Texas” jaja. No fue culpa de nadie, simplemente desconocían el producto. En general, las aulas se ensucian más durante las clases de caracterización o al hacer moldes de escayola pero nada que no se pueda solucionar. Los alumnxs están nerviosos durante los exámenes y las clases prácticas y es normal que queden plumas, alfileres o materiales fuera de lugar. Siempre se puede arreglar y no es un problema grave.
“Trabajar con personas tan jóvenes y creativas me ha enseñado muchísimo”
Siempre estás disponible cuando los alumnxs te necesitan para un maquillaje de piel madura. ¿Cómo es esa experiencia de “ser modelo por un día”?
Me encanta, me hace sentir como una reina. Soy una persona algo vergonzosa pero también disfruto siendo la protagonista por un día. Me tratan con mucho cuidado y siempre recibo comentarios muy positivos, lo que me hace sentir especial y apreciada. Además, salir maquillada es un extra de diversión y autoestima.
¿Qué te ha enseñado trabajar rodeada de gente tan creativa?
Trabajar con personas tan jóvenes y creativas me ha enseñado muchísimo. He aprendido a ser más tolerante y empática, a entender mejor a los demás y a no juzgar a nadie por las apariencias. Cada persona tiene su historia y su forma de ser, y eso me ha ayudado a ser más comprensiva y paciente. Me gusta ver que cada alumnx o compañera tiene algo único que aportar.
¿Hay algún curso, grupo o generación que recuerdes con especial cariño?
Sí, recuerdo con mucho cariño un grupo durante la pandemia, que tenía clases por la tarde con Félix Alcolea. Aunque no recuerdo todos los nombres, sí sus caras y la alegría que tenían. En general, siempre he tenido muy buena relación con los alumnxs y me encanta ver su esfuerzo y dedicación, felicitándolos cuando hacen bien su trabajo.
Si tuvieras que elegir un recuerdo que te gustaría guardar para siempre, ¿cuál sería?
Me quedo con la etapa de 2014 a 2017. Fue un periodo muy especial, lleno de aprendizajes y risas. Las últimas etapas también han sido bonitas y significativas, pero esas primeras vivencias siempre tendrán un lugar muy especial en mi corazón.

“A lxs alumnxs les diría que nunca tiren la toalla”
Estás a la espera de una operación que marcará el inicio de tu jubilación. ¿Qué planes tienes para esta nueva etapa?
Quiero hacer muchas cosas aunque probablemente no llegue a todas… Me encantaría apuntarme a una escuela para mejorar mi escritura y aprender a escribir sin faltas de ortografía porque cuando comparto algo en redes sociales, a veces la gente se fija más en eso que en el contenido. También quiero pasar más tiempo con mi familia, que actualmente veo poco debido a mi horario, y visitarles más a menudo. Además, tengo un proyecto muy querido: colaborar con alguna asociación de animales y ayudar en lo que pueda, porque los animales me apasionan. Y, sobre todo, disfrutar de la libertad de decidir cada día a quién ver y qué hacer.
¿Cómo te gustaría que te recordáramos en la escuela?
Me gustaría que me recordarais como una persona sencilla y de buen corazón.
¿Qué significa para ti Køhl School en una frase?
Køhl School ha sido una etapa de mi vida que me ha marcado profundamente. Me ha enseñado a comprender mejor a las personas, sobre todo a quienes parecen diferentes. Venir a la escuela no ha sido un esfuerzo sino un placer. Para mí ha sido como venir a casa y me llevo recuerdos muy bonitos de este tiempo.
Y ya para finalizar, ¿qué mensaje darías a nuestros alumnxs?
Les diría que nunca tiren la toalla. Aunque lleguen momentos difíciles o alguien que les diga que no valen para algo, no deben hacer caso. Deben seguir con lo que les gusta, luchar por sus sueños y esforzarse, porque es así como se consiguen las cosas. Puede que no sea ahora pero con paciencia y dedicación, lo lograrán.
Muchas gracias Rosa por todos estos años. Disfruta de tu jubilación, ¡te vamos a echar mucho de menos!