Los labios son una de las zonas más sensibles del rostro, poseen una piel fina y delicada y se ven afectados tanto por agentes externos como el frío o el calor como por la alimentación, los hábitos o los productos de cosmética. Y es que, no tienen melanina, poseen poca grasa y están continuamente expuestos por lo que no puedes evitar que los labios se agrieten, se sequen o se irriten. También con la edad pierden un poco de su tersura natural y es más difícil mantener su hidratación. Por todo ello, ¿sabes llevar a cabo un buen cuidado de labios? Te explicamos los pasos que debes seguir para que siempre estén en perfectas condiciones.
El cuidado labial es tan importante como las rutinas faciales diarias. De él depende que estén preparados para soportar el maquillaje y que este luzca con total expresividad. Por eso, tal y como explicamos en nuestro Curso de Maquillaje Profesional, uno de los pasos previos al perfilado y maquillaje de labios es hidratar y cuidar esta parte del rostro con productos específicos.
Cómo cuidar los labios paso a paso
Como ya sabes, existen multitud de productos específicos para cuidar los labios aunque es fundamental saber cómo utilizarlos y cuándo. Incluir algunos de los pasos en la rutina habitual ayudará a que se vean saludables, bonitos y suaves todos los días y no solo cuando presentan algún problema.
Exfolia los labios
Al igual que el resto de la piel, los labios también necesitan ser limpiados y exfoliados de vez en cuando para eliminar las pielecitas y rugosidades que se suelen acumular. Además, esto permite que el bálsamo hidratante penetre mejor y que la textura esté más lisa.
Dado que se trata de una zona muy sensible hay que realizar la exfoliación de labios muy suavemente con movimientos circulares y solo en casos muy extremos se puede realizar una vez a la semana como máximo. Para ello se puede utilizar un exfoliante labial casero (el azúcar con aceite o miel es un gran aliado) o apostar por algunos de los productos específicos que hay en el mercado en formato barra o bálsamo. Muchos de ellos son de ingredientes naturales como la cera de abeja, el azúcar, la manteca de karité, el café o el cacao y también son ultrahidratantes. Otra alternativa muy común es realizar la exfoliación con el cepillo de dientes pero en este caso hay que tener mucho cuidado y usar o bien cepillos específicos o modelos con cerdas muy blandas.
Utiliza bálsamo de labios
Resulta esencial utilizar bálsamo de labios de forma habitual ya que una hidratación constante es la base del cuidado de labios. Sin pasarse, conviene utilizar diariamente un bálsamo en formato barra, gel o semisólido que cuente con una formulación nutritiva y vitaminas que recuperen esta zona de los efectos a los que se ven sometidos (como comer, beber, fumar, el aire o el sol). Existen numerosas opciones, desde las más intensivas en formato aceite, a los bálsamos con color o los cacaos de labios sencillos y ligeros de toda la vida. Elegir la más adecuada en base a las necesidades es clave. Asimismo, también se puede aplicar una mascarilla en los labios por la noche, ya que es el momento ideal para absorber mejor el producto y regenerar la piel.
Hidratar antes de maquillar
Tanto en el día a día como a la hora de maquillarlos, los labios tienen que estar perfectamente hidratados para que el maquillaje se vea bonito y, sobre todo, para que se puedan perfilar bien. Si los labios están muy secos esta tarea puede ser complicada ya que se cuartea y el contorno no queda bien definido. La hidratación del labio es conveniente hacerla en el momento de hidratar la piel para que el labio absorba el producto, se quede suave y sin exceso de hidratación. Por textura y pigmentación a veces el labio inferior es más complicado a la hora de perfilarlo por lo que una buena hidratación ayudará.
Protege tus labios del sol
El aire, el frío y el sol son algunos de los principales causantes en los problemas en los labios. Los rayos UV del sol dañan la piel y hacen que se sequen o agrieten por lo que es imprescindible aplicar un bálsamo específico con protección solar SPF 15 o superior cuando salgas al aire libre, tanto en invierno si vas a la montaña o a esquiar como si estás en la playa en verano.
Buenos hábitos para el cuidado de labios
Al margen de seguir todos los pasos anteriores para el cuidado de labios, también puedes tener en cuenta los siguientes consejos y lucirás unos labios de lo más saludables.
- Desmaquilla siempre los labios: Los pintalabios, gloss y demás productos tienden a resecar la zona (por muy jugosos e hidratantes que sean) por lo que es esencial eliminar cada noche los restos de labial y dejarlos respirar. Apuesta por un desmaquillante específico de labios y aplica el bálsamo después.
- Evita morder o lamer los labios: Sobre todo si tienes pielecitas, no caigas en la tentación de arrancarlas porque esto solo hará que estén más irritados y con heridas. En este caso, apuesta por una exfoliación suave y un tratamiento reparador.
- Bebe suficiente agua: Muchas veces los labios son reflejo de la deshidratación del cuerpo por lo que beber agua es siempre una buena idea para cuidarnos.
- Ten cuidado con los productos faciales: Algunas cremas, sérums o mascarillas (e incluso la pasta de dientes) pueden contener principios activos que irritan los labios. Aplícalas con cuidado.
Como ves el cuidado de labios es un mundo pero es muy fácil de incorporarlo al día a día. No los descuides y los tendrás siempre en plenas condiciones.
